Habitantes de la alcaldía Cuauhtémoc temen que la región se “zacatequize” con la llegada de Caty Monreal.
La figura de Ricardo Monreal, destacado político de Morena y de la Cuarta Transformación, emerge con una influencia que, para algunos, ha sido premiada por el presidente de la República con la candidatura de su hija Caty Monreal para la alcaldía Cuauhtémoc, aspecto que ha suscitado interrogantes y temores entre la población.
Medios de comunicación, expertos y analistas señalan que esta intempestiva candidatura de la hija de Monreal destaca en el escenario político únicamente por el apellido que le representa un aparente premio a la familia por su alineación a la estrategia de seguridad “abrazos no balazos”, filosofía que ha demostrado un resultado fallido en el contexto de violencia que se vive en Zacatecas, tierra natal de los Monreal, gobernada por David Monreal, tío de la candidata por la Cuauhtémoc.
Cabe destacar la situación alarmante de Zacatecas con Fresnillo a la cabeza como la ciudad más peligrosa de México y donde el año pasado fueron asesinados dos integrantes de la familia Monreal, Jorge Antonio Monreal sobrino del ex senador y su cuñado, Juan Pérez Guajardo.
Con la probabilidad de que alcaldía de Cuauhtémoc se cubra por el manto de los Monreal, las preocupaciones sobre una posible «zacatequización» de la demarcación no son infundadas, pues la historia de esta familia en posiciones de poder no ha estado exenta de acusaciones de corrupción y vínculos con el crimen.
La historia ha demostrado que todo lo que tocan los Monreal parece estar destinado a la destrucción, por lo que los habitantes de esta zona de la Ciudad de México ven con preocupación el impacto en materia de inseguridad que pueda tener la llegada de Caty Monreal al gobierno.