A fin de garantizar el acceso a la atención médica gratuita de la población sin seguridad social, “estamos buscando federalizar de nuevo todo el sistema de salud público” en el país, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En conferencia matutina en Palacio Nacional, señaló que tras la descentralización del sistema de salud público “se vino abajo, casi se destruyó, porque la Secretaría de Salud se convirtió sólo en un ente normativo, se quedó a cargo de manejar 10 hospitales, incluidos los Instituto Nacionales de Salud, y todo lo demás era mandar dinero a los estados”.
Recordó que con la creación del Seguro Popular, los recursos que se enviaban a las entidades “se usaban para otra cosa, se desviaban, y el sistema de salud pública estaba en el abandono, tirado, pero ahora estamos llegando a acuerdos con los gobernadores para que la federación se haga cargo de garantizar el derecho a la salud”.
Para ello, adelantó, se tomará como ejemplo el IMSS-Bienestar, que ofrece atención médica gratuita de primer nivel en unidades médica (en zonas rurales), y por un determinado número de unidades se crea un hospital de 40 camas”. Se trata, explicó, de un modelo de atención sanitaria creado hace 40 años como IMSS Coplamar, y que ha tenido diferentes nombres a lo largo de los sexenios.
Es un modelo, dijo, que afortunadamente se conservó y funciona muy bien, y hoy cuenta con 80 hospitales manejados por el Estado. “A imagen y semejanza de lo que es el IMSS-Bienestar se va a ampliar todo el sistema de salud pública”, subrayó.
López Obrador señaló que los hospitales que están por inaugurarse en Sonora y Durango, entre otros estados, “lo que queremos es que sean operados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que es una institución más sólida, porque podríamos levantar todo el sistema de salud, pero lo que queremos es darle continuidad”.
En La Jornada