Badiraguato, Sin. La siembra de enervantes está en franca decadencia, lamentablemente ahora se envenena a los jóvenes con fentanilo, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En este municipio que históricamente se ha relacionado con la siembra y tráfico de mariguana, el mandatario consideró heroico que, en un contexto de abandono del Estado, muchos salieron adelante con el estudio, pero “otros cayeron en la trampa de sumarse a las filas de la delincuencia”.
Ahora, expresó, se atienden las causas que dieron origen a la delincuencia y se ofrecen opciones y alternativas a jóvenes y campesinos.
“Le va a ir muy bien a Badiraguato. Es un pueblo que tiene mucha suerte. Va a tener un gobernador que es de aquí”, dijo en referencia a Rubén Rocha Moya, quien ganó las elecciones del 6 de junio y acompaña al Presidente en esta gira.
López Obrador resaltó en este municipio de la sierra sinaloense que antes en la región y el país lo que más se cultivaba era mariguana y amapola, que han sido sustituidas por drogas sintéticas.
“Son químicos. Esos no se producen en México, se traen de Asia, entran de contrabando por el Pacífico, Manzanillo (Colima) y Lázaro Cárdenas (Michoacán). Se producen en las llamadas ‘cocinas’, laboratorios, que no se instalan en el medio rural, sino en las periferias de las ciudades”, refirió.
Sostuvo que aun cuando ha caído la siembra de enervantes, ello no implica que se detendrá la erradicación de plantíos y dijo que se fortalecerán las actividades productivas para dar opciones y alternativas a las comunidades.
“Lo que está relacionado con el narco es el dinero. Lo que más utilidad deja son los químicos, que es lo más dañino. El fentanilo aniquila en seis meses o un año a un joven”, cuestionó.
El mandatario se comprometió a continuar la entrega de recursos para la carretera de Badiraguato a Guadalupe y Calvo, así como inaugurarla a finales de 2022.
En La Jornada