“Primero vienen y te insisten para que los apoyes, te exigen que dejes de pagar tu casa y que les des una cuota para el abogado, luego cuando vienen a sacarte de tu casa nadie se aparece, ni el teléfono te contestan” Ana “N”, vecina de Real del Sol, Tecámac.
Desde hace más de 30 años la vivienda ha sido un problema constante en México, sin embargo, en la última década la situación ha empeorado, esto con el surgimiento de grupos de estafadores que, bajo la bandera de defender la vivienda, han provocado que cientos de familias terminen en la calle.
Para muestra, baste con observar lo que está pasando en distintos fraccionamientos en el municipio de Tecámac, Estado de México, donde diferentes organizaciones, que cobran gastos de representación a los pobladores, han llevado a cientos de familias a perder lo único que tenían, sus casas.
“Yo hace un tiempo estuve con uno de estos grupos, el Frentemex, pues, la verdad, tenía la necesidad de que me ayudaran con mis pagos, pero nada más era eso. Al principio la cosa fue muy bien, sólo había que darles $200 pesos a la semana para que el abogado nos ayudara con nuestros tramites. Luego nos dijeron que ya no íbamos a pagar las mensualidades del crédito, ahí se emociona uno, sin saber la bronca que se está echando encima uno con esta gente.” Comenta Ana “N”, vecina del fraccionamiento Real del Sol, quien nos pide guardar anonimato por temor a represalias del Frentemex y de su líder.
Estas organizaciones buscan a personas que tiene problemas de cualquier tipo con sus viviendas o con el pago de sus hipotecas, les prometen que pueden ayudarlos a tener sus casas más fácilmente a través de la interposición de amparos para no pagar, pero cuando las cosas se complican, son los dueños los principales afectados por estos grupos.
“Ya cuando uno está metido en esto y ya comprometió su casa y el dinero que estuvo pagando en el crédito y, además súmele la representación del licenciado, todo eso son gastos. Sin saberlo uno ya tiene más deudas que nada. El licenciado y los del grupo nos hacían ir a marchas, que según con eso nos iban a hacer caso, pero nunca nos resuelven nada, nomas siguen buscando a más gente y nos piden apoyo, pero nunca se ve nada claro, no tenemos ningún beneficio, sólo problemas”, afirmó Ana “N”.
Con la suspensión de pagos a los créditos hipotecarios, estos abusadores provocan que la gente tenga que enfrentar juicios sin estar preparados, es ahí donde ellos entran a cobrarles “cuotas” de representación, que se mantienen mientras duren los procesos, mismos que después de años terminan con la gente desalojada de sus viviendas.
“Los del grupo hablan y hablan, el licenciado ni se diga. Nomás le lavan el cerebro a uno. Mi caso llevaba años, ya ahorita me salí de con ellos. Imagínate, a mi vecina la sacaron de su casa y nadie la ayudó. Anduvieron buscando al licenciado y que no estaba disponible, que ni en el Estado de México estaba. Ahí es cuando uno necesita el apoyo y él paseándose con lo de las cuotas. Nadie vino a defenderla. Y el amparo, y el juicio, y todo lo que dijo el licenciado, ¿para qué sirvió? Al final se quedó sin casa, pero eso sí, le prometen a la vecina que si alguien más compra esa casa los van a demandar y los van a sacar a la fuerza y si esa gente no se sale a la buena, pues por la mala los van a sacar”. Puntualizó Ana “N”.
Y es que, ante la impotencia de estos grupos por los desalojos y la perdida de las viviendas, han comenzado a amenazar con radicalizar sus acciones, llegando incluso a afirmar que a las personas que adquieran casas de manera legal en los remates, los van a demandar y van a evitar por todos los medios que tomen posesión de esas viviendas que de manera legal compraron. De tal forma que, si alguien compra una casa que haya sido desalojada, estará comprando un enemigo con estas agrupaciones.
“Es comprarse un enemigo. Yo le recomiendo a la gente que investigue bien la casa que va a comprar, porque puede ser que esta gente se la quiera robar o que luego le salgan con que es de ellos y se le metan a la fuerza, eso ya lo han hecho antes”. Comentó Ana “N”.
“Yo por eso ya mejor me fui por mi lado, con un abogado de verdad. Sí, me arrepiento por todo lo que perdí, el tiempo y el dinero, a lo mejor ya hasta hubiera acabado de pagar mi crédito, pero nomás le di mi dinero a esta gente y lo único que tengo ahora son problemas. Problemas con ellos, primero porque ya no los apoyo, luego lo del dinero que perdí en sus cuotas y lo más triste es vivir con el miedo de que me vayan a quitar mi casa. Yo ya no sé qué hacer. ¿Quién me va a pagar mi casa si me la quitan por culpa de estos señores? Ellos andan ya muy contentos ¿Y uno? Sin casa, ¿qué hacemos? ¿A dónde nos vamos a ir vivir?”. Señaló Ana “N”
Historias como las de Ana, cada vez son más comunes en distintos municipios del Estado de México, Chihuahua, Guadalajara y en Tijuana. Por eso es importante no dejarse engañar por organizaciones o líderes que prometan viviendas con amparos y juicios, sólo son estafas y fraudes.
[…] También te puede interesar: Pobladores de Tecámac son defraudados por supuestas organizaciones dedicadas a la “defensa” de … […]
[…] También lee: Pobladores de Tecámac son defraudados por supuestas organizaciones dedicadas a la “defensa” de … […]
Los comentarios están cerrados.