Según Víctor Carreto Pacheco, secretario del Trabajo de la Sección 92 de Puebla, desde marzo la CFE ha despedido a 300 trabajadores sindicalizados y de confianza sin que Víctor Fuentes, líder nacional, haya intervenido. La historia del dirigente de los electricistas pasa por el nepotismo, el abuso de poder y la agresión contra las mujeres.
“Estamos desesperados. Parece que no hay poder superior al que él ostenta”. Guillermo es miembro del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM) en Hidalgo y se refiere Víctor Fuentes del Villar, el secretario general desde hace 13 años y que, fiel a la tradición del viejo sindicalismo, planea completar por lo menos dos décadas en el cargo.
El trabajador, cuyo nombre real ha sido cambiado para protegerle de posibles represalias, sostiene que la democracia y libertad sindical que aseguraba la reforma laboral de 2019 está lejos de ser realidad en el SUTERM. “No hay forma para pensar y actuar diferente a la dirigencia nacional, estamos acorralados”, afirma.
Víctor Manuel Carreto Fernández de Lara y Víctor Manuel Carreto Pacheco, padre e hijo líderes sindicales, secundan la declaración de Guillermo y denuncian ser víctimas de una persecución política por parte de Víctor Fuentes. En 2021 la Comisión de Justicia les inició un procedimiento para retirarles sus derechos sindicales.
Mientras hostiga a sus opositores, permitió “el despido injustificado de más de 300 trabajadores” de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) efectuado desde el 1 de marzo. Con el cese masivo, “se cayó la fuerza laboral en 35%”, por lo que será imposible que se cumplan los programas de trabajo para este año y para 2023. Al personal que sobrevivió al recorte “le están cargando la mano y está llegando a un punto en el que está quemado”, denuncia Carreto Pacheco.
Víctor Carreto Fernández de Lara, el padre, es coordinador regional de la división Centro Oriente del SUTERM y además es secretario general de la sección 92 de Puebla. También forma parte del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), es el secretario de Gestión Industrial; en 2018 contendió en la planilla 1, encabezada por Víctor Fuentes, el líder que ahora denuncia.
Su hijo, Víctor Carreto Pacheco, es secretario del Trabajo de la Sección 92 de Puebla. Pero el año pasado, luego de suspender los derechos de padre e hijo, el SUTERM y la CFE “desconocieron la toma de nota” que les otorgó la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), dice Carreto Pacheco. Ambos han permanecido varios años al frente de dicha sección.
“Mi padre empezó a destacar dentro del CEN”, por eso Fuentes del Villar empezó a acotar su influencia, dice Carreto Pacheco. “La persecución comenzó hace unos cuatro años y consistió en irnos quitando centros de trabajo para hacer más pequeña la sección 92”.
“Luego, le abrió un proceso interno a mi papá para quitarle sus derechos sindicales. Lo que trata de hacer es borrarlo para que no pueda ser elegido como líder nacional en las próximas elecciones” señala.
Hostigamiento sexual y contrataciones sexistas
En 2005, al fallecer su tío, Leonardo Rodríguez Alcaine, conocido como La Güera, Fuentes del Villar heredó el trono para liderar a más de 90,000 trabajadores y trabajadoras y administrar sus cuotas sindicales. En 2018, cuando apenas se discutía la reforma laboral, se logró colar a otro periodo que terminará en 2025. Lo hizo sin las reglas democráticas que ahora exige la Ley Federal del Trabajo (LFT), como el voto libre, directo y secreto.
Periodistas de El Universal y Aristegui Noticias han documentado la manera en la que Fuentes del Villar le otorga empleo a las mujeres. Se hace esperar afuera de las oficinas del sindicato, ellas saben que el hombre de más de 80 años suele seleccionar a quien le parece más atractiva. Él sale a bordo de su auto, manejado por un chofer, y ellas corren detrás de él con tacones y ropa ceñida.
De acuerdo con Carreto Pacheco, la influencer Gaby Castillo, vinculada al cártel Unión Tepito, es una de las jóvenes a quien el líder le otorgó una plaza permanente en la CFE.
Wendy Herrera Romero, ex directora jurídica nacional del SUTERM, mantiene, desde 2019, una demanda en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje por violencia laboral y hostigamiento sexual contra Fuentes del Villar. Luego de que comenzara ese proceso, ha recibido amenazas de muerte, según ha denunciado.
El origen de la persecución
Las personas afines al líder “son delincuentes, venden plazas, droga, son golpeadores. Es difícil que nos organicemos así, la gente está amenazada, tiene miedo”, dice Guillermo.
En diciembre del año pasado, el SUTERM llevó a cabo el proceso de legitimación de su contrato colectivo de trabajo (CCT). El 87% votó a favor. “Muchos votamos por el sí porque nos presionaron. Nos decían que nos iba a ir mal, que nos iban a correr, que nos tienen ubicados y que cuando pidiéramos vacaciones o necesitáramos de cualquier cosa no íbamos a contar con ello”, narra el trabajador.
De los 300 despidos que han ocurrido desde marzo pasado, “120 fue contra trabajadores de confianza y 180 de trabajadores sindicalizados. Ése es el nivel que estamos teniendo”, dice Víctor Carreto hijo. “Por primera vez en la historia de la división Centro-Oriente ha habido despidos masivos sin la intervención de Víctor Fuentes ni de los esquiroles”, acusa.
“Hemos sufrido una persecución brutal por disentir. En septiembre de 2021 gente de Fuentes del Villar asaltó nuestras oficinas en Puebla”, señala en entrevista Víctor Manuel Carreto Fernández de Lara, el padre. El abogado y economista asegura que, además, “han secuestrado las cuotas sindicales” de la sección 92, las cuales ascienden a más de 150,000 por mes.
Otro motivo de su ofensiva es que “no estamos de acuerdo cómo negoció el CCT, perdió prestaciones que conquistamos con los años”, dice. Una de ellas es que en 2016 la CFE y SUTERM acordaron elevar la edad de jubilación de 55 a 65 años. “Tuvo que intervenir el presidente Andrés Manuel López Obrador para evitar esa injusticia” y en agosto de 2020 se revirtió la medida.
“Mi padre tiene una amplia carrera legislativa, sindical, social y administrativa”, asegura Carreto Pacheco. Carreto Fernández de Lara ha sido cuatro veces diputado federal por el PRI, “fue fundador del SUTERM y uno de los coautores de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica” de 1975.
En 2018, durante el 18 Congreso Nacional Ordinario, además de reelegir a Fuentes del Villar, el SUTERM reformó sus estatutos y, entre otros artículos, eliminó el que obligaba a sus integrantes a militar o apoyar al PRI.
Y tan pronto asumió nuevamente el cargo, el líder comprometió el apoyo del sindicato para la reforma eléctrica que propone el presidente López Obrador.
Ahora, asegura Carreto Pacheco, “de una forma burda y grosera está impulsando a su sobrino, Efrén Fuentes Ochoa, quien no tiene carrera, ni presencia ni legitimidad para ser su sucesor”. Parece que quiere repetir la historia.
FUENTE: El Economista