Ciudad de México. El objetivo del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil, fundamentalmente, es la seguridad pública en el país, y que se pueda dar seguimiento a quien realiza llamadas desde aparatos en los que se utilizan números de prepago “que se venden sin ningún control y los delincuentes utilizan para cometer delitos, particularmente secuestros, extorsiones y trata de personas”, afirmó Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Al dar a conocer la posición de la dependencia respecto a este registro nacional, el funcionario señaló en conferencia de prensa que se ha tratado de desacreditar esta legislación que fue aprobada de manera reciente, y mencionó que en 155 países que ya manejan bases de datos similares que no afectan los derechos de los usuarios.
Mejía Berdeja mencionó que esta ley no significa que las autoridades den seguimiento a llamadas o mensajes de manera indiscriminada, tampoco la geolocalización de un usuario de manera automática, porque, dijo, en la legislación penal ya se tienen establecidos los mecanismos para que una autoridad pueda pedir legalmente esos datos.
Refirió que el juez segundo de distrito en materia de amparo que otorgó un amparo en contra del registro, actúa de manera “oficiosa” y con el “afán de quedar bien” ya que no se ha definido qué datos biométricos se solicitarán a los usuarios.
Pues dijo que en realidad se trata de un “modelo de seguridad contra modelo ventas. Ya no queremos que detrás de cada llamada de extorsión o secuestro esté una llamada de prepago ni que en el robo de autotransporte haya lo mismo, o como aconteció en Guadalajara, ayer, en la comunidad de Chapalita” donde fueron detenidos más de 30 presuntos integrantes de un grupo delictivo, y se detectó que utilizaban este tipo de aparatos para comunicarse.
Para ampliar sus argumentos mencionó que en el país 16.5 por ciento de líneas son de plan fijo y 83.5 por ciento de prepago, y que es de esta últimas dónde los delincuentes pueden adquirir un gran número de tarjetas Sim, y no se puede conocer quién esta detrás de las llamadas.
Expuso que los usuarios de telefonía que tienen un sistema de contratación han proporcionado sus datos a las compañías telefónicas.
En La Jornada