Las divisas turísticas siguen creciendo a niveles importantes; durante junio del 2022 el ingreso total por concepto de turismo internacional fue de 2,391 millones de dólares, de acuerdo con cifras de las Encuestas de Viajeros Internacionales (EVI) del Inegi.
Aunque los flujos de turistas internacionales que visitan México todavía se encuentran por debajo de los niveles previos a la Covid-19, el gasto que relizan los visitantes sí ha crecido de manera importante en la etapa pospandemia.
Las divisas turísticas siguen creciendo a niveles importantes; durante junio del 2022 el ingreso total por concepto de turismo internacional fue de 2,391 millones de dólares, de acuerdo con cifras de las Encuestas de Viajeros Internacionales (EVI) del Inegi.
Este nivel implicó un crecimiento interanual de 21.1%, abonando un mes más a la tendencia acelerada en el ingreso de divisas turísticas en México. Gran parte de este dinamismo se explica con las bajas restricciones que tiene el país en materia sanitaria y el crecimiento de trabajadores en modalidades remotas en países de América del Norte y Europa.
En total, durante julio, entraron a México 5.5 millones de viajeros internacionales (indipendientemente de sus motivos). Esto refleja que, en promedio, cada turista gastó 434 dólares durante su estancia, equivalentes a alrededor de 8,900 pesos mexicanos.
En el desglose por tipo de viajero se observa que el 60% de las llegadas fueron de turistas de internación, que son quienes visitan México con propósitos de recreación o cultura. El restante de los arribos son de turistas fronterizos y excursionistas.
El turismo fronterizo se ha reducido de manera significativa durante el periodo pospandemia, sólo en julio del 2022 registró una caída de 16.6% en comparación con el mismo mes del año previo.
Los turistas fronterizos son quienes entran al país y permanecen más de una noche, pero en alojamientos o centros cercanos a las fronteras norte y sur del país. La mayoría ingresa por tierra.
El turismo internacional se ha convertido en una de las principales fuentes de divisas para el país, sólo después de los envíos históricos de remesas y la generación de la industria automotriz.
FUENTE: El Economista