El presidente Andrés Manuel López Obrador informó este martes que la futura candidata presidencial del oficialismo, Claudia Sheinbaum, aceptó la protección que ofreció hace unos días el Ejército ante el posible repunte de la violencia política.
“Aceptó Claudia (Sheinbaum)”, afirmó el mandatario en su conferencia matutina de este martes.
El gobernante mexicano dijo además que la futura candidata del opositor Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, a quien también se le ofreció protección, no la ha rechazado “nada más que quiere saber las condiciones. Hoy a las 12 del día va a resolver”.
López Obrador dio esta información luego de que el lunes trascendió el asesinato de dos encuestadores contratados por Morena en Chiapas, al sur de México, donde también secuestraron a otro trabajador.
De acuerdo con sus compañeros, presuntos integrantes de un cártel sacaron a cinco encuestadores, de los que tres son hombres y dos mujeres, del hotel en el que se hospedaban en el municipio de Juárez, en la zona norte del estado de Chiapas, colindante con Tabasco.
Horas después del secuestro, liberaron a las mujeres y aparecieron en un mercado, mientras que dos de los hombres aparecieron asesinados y uno más continúa desaparecido.
El mandatario había anunciado el ofrecimiento de protección a las próximas candidatas presidenciales aunque no se conocen amenazas públicas contra Sheinbaum, de Morena, ni contra Gálvez, del opositor Frente Amplio por México, rumbo a las elecciones de 2024.
Sin embargo, en ese momento reconoció que durante las temporadas electorales en México incrementa la violencia.
Ante ello, este martes señaló que se mantendrá la vigilancia de seguridad para los políticos.
“Vamos a seguir adelante, protegiendo a todos” especialmente, abundó, en el caso de dirigentes como Sheinbaum y Gálvez. “Tenemos la obligación de ofrecerles protección, vigilancia”, enfatizó.
En las elecciones presidenciales de 2018, México registró 774 ataques contra políticos, con un saldo de 152 muertos, incluyendo 48 aspirantes, mientras que en 2021, hubo mil 66 ataques a políticos y 102 fallecidos, de los que 36 eran candidatos, por lo que fueron los comicios más violentos en la historia, según la consultora Etellekt.