Colectivos y madres víctimas de feminicidio y desaparición, restauraron las vallas de la Glorieta de las Mujeres que Luchan, para conmemorar el segundo aniversario de la antimonumenta el próximo 24 de septiembre.
“Hoy estamos tratando de dar mantenimiento a este espacio de memoria viva, un espacio para recordar que hay impunidad, injusticia y miles de mujeres que tienen que salir a buscar justicia por su propia mano”, explicó Marcela Guerrero, integrante del colectivo las Mujeres que Luchan.
La restauración y arreglos consistieron en la pinta de las vallas a las que se agregarán dos nombres de mujeres desparecidas, así como el retoque de pintura de la cruz rosa ubicada enfrente de la antimonumenta.
Instalaron una nueva estructura de fierro que estará de manera permanente para exhibir diversas exposiciones fotográficas de mujeres en la lucha.
“Vamos a instalar una estructura con una banca que servirá para montar exposiciones fotográficas y tendederos”, resaltó.
El 25 de septiembre de 2021, la entonces Glorieta de Colón fue tomada por mujeres indígenas, afrodescendientes, familiares de víctimas de femincidio y personas desaparecidas para luchar y exigir justicia.
Desde este entonces las activistas y madres han buscado el reconocimiento del nombre y del espacio como “La Glorieta de las Mujeres que Luchan”.
Andrea Soto Hernández, es madre de Verónica Soto Hernández, víctima de femincidio el 1 de noviembre de 2019, en Naucalpan, Estado de México. Este sábado Andrea apoyó con las reparaciones y participó en las actividades convocadas por los colectivos como parte de su lucha.
“Mi hija tenía 22 años cuando le quitaron la vida. A casi cuatro años de que la mataron la carpeta de investigación sigue igual y no hay ningún avance, no hay ninguna respuesta”, contó a El Sol de México.
Explicó que actualmente es integrante del colectivo Siempre Vivas, donde le brindan acompañamiento para continuar con la búsqueda de justicia para su hija.
“Hasta ahorita ellas no hacen más que acompañarnos, darnos esperanza. A pesar de que me cuesta trabajo integrarme trato de estar con ellas correspondiendo y apoyando en estos espacios de lucha”, señaló.
En estos cuatro años he concluido que el dolor no se comparte, solo se acompaña
Con mantas bordadas, un taller de lectura y de bordado, el colectivo Siempre Vivas participó en las actividades previas al segundo aniversario de la Glorieta de Las Mujeres que Luchan.
“Este espacio va existir mientras siga exigiendo la necesidad de buscar justicia en el país y ningún proyecto gubernamental puede contra eso. Este una toma de especio justa y necesaria que muestra el rostro de mujeres y madres”, subrayó Alejandra, integrante del colectivo Siempre Vivas.