Ciudad de México. La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, aseveró hoy que hubo “irregularidades” antes y después del asesinato de la médico Mariana Sánchez, por lo cual un grupo de seguridad federal estará atenta del caso para colaborar y “hacer un escrutinio permanente” para, en su caso, imputar posibles delitos.
Pidió a las autoridades de Chiapas actuar con mayor velocidad en la investigación.
A pregunta expresa en la conferencia de prensa matutina, la funcionaria respondió que habrá un “antes y un después” tras la muerte de la joven, principalmente porque las autoridades federales han detectado irregularidades.
“Qué bueno que lo tratas porque desde esta posición privilegiada de estar en el micrófono en este momento, yo primero quisiera hacer un llamado también a las autoridades de Chiapas para que pudiéramos actuar con mayor velocidad en las investigaciones”, dijo.
Sánchez Cordero comentó que han tenido conocimiento de algunas “situaciones”.
Por ejemplo, precisó, “que Mariana solicitó su cambio y no fue removida de ese lugar; tenemos también información porque así se ha manifestado y es pública esta información, de que tenía algún compañero que la estaba acosando permanentemente”.
Tenemos también información – agregó la secretaria- de que su cuerpo fue incinerado, y aunque dicen las autoridades que practicaron la necropsia, fue incinerado de manera bastante rápida, sin consentimiento, y sin darle cuenta a su familia.
“Así que todas estas irregularidades, empezando con la conducta irregular de quien no actuó con diligencia para cambiarla de lugar y para removerla de esta situación, vamos a solicitar, respetando la autonomía del estado, de las autoridades estatales, pero sí se acordó en el gabinete de seguridad esta mañana de reunir un equipo federal que va a estar coordinado por la secretaría de Gobernación y de Seguridad Pública”.
En este grupo participará la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim) así como la Unidad de Apoyo al Sistema de Justicia, entre otras funcionarias y funcionarios de la secretaría de Seguridad.
También vamos a “tener un escrutinio permanente” en la actuación de las autoridades para ir visibilizando y haciendo transparente la actuación, a fin de no sólo deslindar responsabilidades sino imputar.
Aclaró que se privilegiará la presunción de inocencia, debido proceso y garantía de audiencia de todos pero sí “muy muy estrictamente haciendo un seguimiento puntual de esta actuación”.
Señaló que el caso le ha dolido de manera particular porque la víctima era una persona que realizaba su servicio social, a cuyo grupo reconoció ampliamente y pidió a las comunidades que las reciba de manera calurosa.
—¿Qué mensaje daría por los estudiantes de medicina que son abandonados a su suerte en el servicio social, y que cambios habrá para que estos casos no se repitan?, se le preguntó.
—Creo que este va a ser un antes y después, de lo de Mariana, para que todas las autoridades de salud tanto federales como locales apoyen y hagan un seguimiento muy puntual de estos estudiantes que realizan este tipo de servicio social, apoyarlos, vigilar que estén en las condiciones lo más cómoda posible, y si hay alguna denuncia de violencia, protegerlas. Es un antes y un después, es una llamada de atención muy importante para que estemos pendientes de estos jóvenes.
«En lo personal me siento profundamente indignada de lo que pasó con Mariana. Indignada».
En La Jornada