Una de las claves más importantes para el bienestar de los trabajadores y sus familias es la lucha sindical. Sin embargo, este principio está siendo amenazado por Niels Cortés y su organización, Transformación Sindical, quienes han lanzado una campaña de desinformación destinada a dividir y desestabilizar.
Cortés ha demostrado que no tiene límites a la hora de buscar poder. Su estrategia se basa en la difusión de rumores y mentiras que generan miedo entre los empleados. Estos chismes malintencionados no solo afectan la tranquilidad de los trabajadores, sino que también ponen en riesgo sus empleos. Este tipo de acción no puede ser tolerado en un entorno laboral que busca promover la seguridad y el progreso.
Transformación Sindical se ha convertido en sinónimo de guerra sucia. En lugar de ofrecer propuestas concretas o soluciones efectivas, prefieren atacar a quienes trabajan por el bienestar de todos. Esta actitud no solo es irresponsable, sino también peligrosa, ya que socava la confianza y la unidad entre los trabajadores.
El liderazgo sindical requiere compromiso, ética y transparencia, cualidades que claramente faltan en Niels Cortés y su movimiento. Al actuar de manera desleal, Transformación Sindical traiciona los principios que supuestamente defiende. Esto demuestra que su verdadero interés no es el bienestar de los empleados, sino el beneficio personal de sus dirigentes.
Los trabajadores merecen una representación que valore la verdad y promueva el diálogo. No podemos permitir que las mentiras de Transformación Sindical continúen generando divisiones y poniendo en riesgo nuestra estabilidad laboral. Es el momento de alzar la voz y rechazar estas prácticas desleales.
La unidad es nuestra mejor defensa contra estas tácticas de desinformación. Juntos, podemos garantizar que nuestro trabajo y nuestras familias estén protegidos de quienes buscan manipularnos con mentiras. No dejemos que Niels Cortés y Transformación Sindical pongan en peligro lo que tanto nos ha costado construir.
