Esta conmemoración internacional se debe a un evento sucedido en 1975, cuando trabajadoras sexuales organizaron una protesta
Este 2 de junio se conmemora el Día de la Trabajadora Sexual, un tipo de trabajo a menudo menospreciado y que, entre otras cosas, implica un gran riesgo de seguridad para quien lo ejerce.
En esta conmemoración, de corte internacional, se busca erradicar la discriminación a la que se enfrentan día con día las trabajadoras y trabajadores sexuales, así como el poder lograr mejorar sus condiciones de vida y por supuesto laborales.
Otra de las conversaciones en torno al trabajo sexual es la distinción de este en su modalidad de explotación sexual, al ser este último un delito y una grave violación a los derechos humanos de niños, niñas, mujeres y hombres.
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De acuerdo con la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y Para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delitos, la explotación sexual es: toda acción u omisión dolosa de una o varias personas para captar, enganchar, transportar, transferir, retener, recibir o alojar a una o varias personas con fines de explotación.
El trabajo sexual contempla diversas variantes y tipos de actividades, que se pueden ejercer en la vía pública, en algún establecimiento mercantil o inclusive por internet.
Para distinguir entre trabajo y explotación sexual es importante determinar la autonomía con la cual las personas deciden ejercer y ofrecer servicios sexuales y/o eróticos para obtener algún tipo de ingreso.
¿Por qué se conmemora el Día de la Trabajadora Sexual el 2 de junio?
La conmemoración de este día se instituyó precisamente el 2 de junio, después de que en una fecha similar, pero de 1975, 150 trabajadoras sexuales ocuparon la Iglesia de Saint-Nizier de Lyon, Francia.
Estas mujeres buscaban así llamar la atención sobre su mala situación y las represalias continuas que sufrían por parte de la policía, como abusos, violencia, multas y encarcelamientos.
Hoy en día, la criminalización y la discriminación hacia quienes ejercen el trabajo sexual, aunadas a la marginación y falta de acceso a la información, impiden el acceso a los beneficios de seguridad social que tienen otro tipo de trabajadores.
¿Cuál es la situación actual de las Trabajadoras Sexuales en México?
La pandemia de COVID-19 provocó varios problemas, entre ellos, el cierre de diversos giros comerciales situación que orillo a que muchas personas buscaran en el sexo servicio una alternativa para tener ingresos.
Respecto a la situación en México la Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer Elisa Martínez, A.C. destacó que aumentó hasta 100 por ciento, pues ante la falta de trabajo, mujeres, trabajadoras sexuales trans y cisgénero vieron en ese oficio una oportunidad de generar ganancias y se volvieron el sustento del hogar.
Desde hace 19 años se lleva a cabo un encuentro anual de la Red Mexicana de Trabajo Sexual (RMTS), manteniendo en el centro la preocupación por el agravamiento de la situación de las personas trabajadoras sexuales.
Desde el inicio de la pandemia, los y las trabajadoras sexuales se han enfrentado a dos grandes problemas: la disminución de sus ingresos y el riesgo constante de contagio del coronavirus.
El 1 de junio de 2020, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) hizo un llamado al reconocimiento de los impactos diferenciados de la pandemia por la COVID-19 en las personas trabajadoras sexuales (PETS), y a que se implementen medidas diferenciadas para paliar los efectos en su salud, economía e inclusión social para evitar que la brecha de desigualdad se profundice.
De acuerdo con la Brigada Callejera, antes la preocupación de las trabajadoras sexuales era la “defensa de la esquina”, hoy es la defensa de la vida; dado que el riesgo al que se exponen las y los trabajadores sexuales y las personas que defienden a modo de activismo sus derechos ha ido en aumento.
Esta población se encuentra a diario en riesgo, mientras ejercen su trabajo, de ser objeto de trata de personas, extorsiones, violencia de género, feminicidios, homicidios y discriminación.
FUENTE: Reporte índigo
