El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos inició investigaciones en 11 líneas de cruceros de seis compañías que desembarcan pasajeros en Cozumel, Mahahual y Los Cabos.
El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) de Estados Unidos inició investigaciones por contagios en 63 cruceros, de los cuales prácticamente la mitad tiene itinerarios que pasan por uno o varios destinos en México, principalmente en Cozumel, Mahahual, Cabo San Lucas y Ensenada.
El CDC lanzó hace algunas semanas el programa Cruise Ship Color Status de la Guía de Cruceros del CDC, que indica la cantidad de casos de Covid-19 en 109 cruceros que operan en Estados Unidos, de las cuales 63 se encuentran en categoría naranja, lo cual implica que 0.3% o más del total de pasajeros –incluyendo turistas y tripulación– ha resultado contagiado en la embarcación. Pese al reporte de los contagios, todos los cruceros se mantienen en operación.
De los cruceros en categoría naranja, 31 tienen previsto atracar en al menos un destino mexicano. Cozumel, el mayor puerto del país, tiene programada la llegada de 20 embarcaciones para las próximas semanas. Le sigue Mahahual, con la próxima llegada de 11 cruceros bajo investigación del CDC, y Cabo San Lucas, con cinco embarcaciones.
Otros destinos mexicanos que recibirán cruceros en categoría naranja son Puerto Vallarta, Mazatlán, Ensenada, Acapulco, La Paz y Loreto.
La mayor parte de los cruceros son de la compañía Carnival Corporation, con 16 embarcaciones, seguida de Royal Caribbean Cruises (con siete) y Norweigan Cruise Line (con cinco). Además, las compañías MSC y Virgin Voyages tienen un crucero cada una bajo investigación con itinerario en México, e incluso el crucero Disney Magic, de Disney Cruise Lines, tiene el reporte de no contar con 100% de los pasajeros vacunados.
Los cruceros fueron el último eslabón del sector turístico en reactivarse, tras permanecer más de un año sin operar a causa de una medida impuesta por la propia CDC. Aunque la restricción –conocida como no sail order– se levantó el verano del año pasado, para el invierno la variante ómicron derivó en una ola de nuevos contagios. Si bien la autoridad estadounidense no detuvo la operación de las compañías, sí emitió una recomendación de no viajar en cruceros, calificando estos viajes como de “muy alto riesgo”.
“Es especialmente importante que los viajeros que están en un riesgo de enfermedad severa a causa del Covid-19 eviten los viajes en cruceros”, dijo en un comunicado.
Ante esto, las navieras no reaccionaron positivamente. “A luz de nuestros protocolos altamente efectivos, estamos decepcionados de las últimas alertas sanitarias del CDC, que continúan amenazando a la industria de cruceros de una manera muy diferente respecto a otros sectores”, dijo la compañía Carnival en un comunicado. “La alerta del CDC tampoco da cuenta de los estrictos y reforzados protocolos de salud de la industria de cruceros”.
¿Qué dice el gobierno mexicano?
El protocolo de la Secretaría de Salud federal –que, a su vez, ejecutan las secretarías estatales– indica que los cruceristas pueden entrar y salir del país sin restricciones, e incluso para recibir atención médica si resultan contagiados.
“En caso de que las personas que viajan en los cruceros presenten síntomas de la enfermedad COVID-19 o una prueba positiva al virus SARS-CoV-2, se les proporcionará la atención médica requerida”, dijeron en diciembre pasado las secretarías de salud y de turismo, en un comunicado conjunto. “Las personas asintomáticas o con un cuadro leve se mantendrán en cuarentena preventiva, y aquellas que presenten síntomas de gravedad serán atendidas en los hospitales de las ciudades en las que se encuentren”.
Al respecto, los puertos tienen protocolos sanitarios que corren a cargo de instituciones de salud estatales, y de las administraciones portuarias que operan los recintos, pero aseguran que se impide el desembarque de pasajeros contagiados.
“Todo depende de las autoridades sanitarias del barco, que actúan de acuerdo con los protocolos del CDC. Si alguien desafortunadamente da positivo, hay un protocolo interno”, explica Rodrigo Esponda, director general del Fideicomiso de Turismo de Los Cabos. “Si alguien está contagiado, no puede desembarcar en Los Cabos ni en ningún otro puerto, y ese es el protocolo”.
Pese a que no desembarcan, los destinos son conscientes de que hay tripulantes contagiados en las embarcaciones que llegan a sus puertos.
“En cuanto a (puesrto) Progreso, en Yucatán (…) hay un monitoreo permanente por parte de Sanidad Internacional en el Puerto, pero los barcos pueden llegar aún con pasajeros y/o tripulantes contagiados, siguiendo el protocolo adecuado para no bajar ni propagar contagios”, dijo Blanca Morales, jefa de relaciones públicas y atención a medios de la Dirección de Promoción Turística de Yucatán.
Expansión se puso en contacto con todas las compañías de cruceros que se mencionan en este texto, pero hasta su publicación no se había obtenido la respuesta de ninguna.
FUENTE: Expansión