Tras calificar de “muy buena” reunión que sostuvo con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en donde se priorizó superar los malos entendidos, el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que se coincidió en la visión estadunidense de consolidar la región de América del Norte, aunque México planteó la necesidad de involucrar una perspectiva continental. “Estamos de acuerdo de consolidarnos como región incluyendo los tres países, sino que estábamos a favor de la unidad de todo el continente”.
Durante su conferencia destacó particularmente la actitud de la secretaría de Comercio, Gina Raimondo quien fue muy propositiva “amistosa. Nada de qué van a castigar a México por su política energética, lo que nuestros adversarios quisieran, buscando que nos peleemos” e incluso dijo que en todo el encuentro jamás se utilizó la palabra arancel o sanción, por lo que confió en que el diferendo por el sector energético se supere en el marco de las consultas, sin llegar a los paneles, porque la postura expresada por Biden es de respeto a la política energética de México
Señaló que no tuvo nada que ver con el mensaje poco diplomático que en su momento se utilizó para solicitar las consultas en el marco del tratado comercial. Sin embargo, mencionó que en el encuentro expresó su extrañeza por la forma como se dio a conocer esta petición de consultas particularmente porque fue después de su visita a Washignton donde hubo una recepción amistosa del presidente Joe Biden, con la vicepresidenta Kamala Harris y un encuentro con empresarios de ambos países, pero cinco días después llegó el comunicado poco dipomático.
“En mi interpretación, esto fue producto de nuestros adversarios, sobre todo de los de aquí. Que fueron a hacer politiquería y sorprendieron a quienes emitieron ese documento pero todo está aclarado mientras haya comunicación”, porque no es lo mismo que se lo exprese directamente a Blinken a que se lo mande decir o lo conozca por un informes.
En este sentido, señaló que previo a la visita a Washington, se discutió con las empresas estadounidenses con las que se tenían diferencias, para dialogar y superarlas, que fue el entorno previo al encuentro en la Casa Blanca.
Al hacer un balance del encuentro de este lunes, López Obrador consideró muy bueno el resultado porque se convirtieron rubros de cooperación bilateral particularmente en acciones conjuntas para el desarrollo del sector energético y de la industria automotriz. México presentó el denominado Plan Sonora para el desarrollo de generación de energía solar y el respaldo de plantas que utilizarán gas, que permitiría incluso, la distribución de electricidad en Arizona y California.
Como parte de la coincidencia del impulso al desarrollo de automóviles eléctricos, se les notificó de la nacionalización del litio y la forma como operará la nueva empresa que explotará el mineral, que se utiliza fundamentalmente en la producción de baterías para vehículos.
En el encuentro, México también introdujo el tema migratorio, expresando que se opondrán a que la condición de los mexicanos migrantes sean utilizados como parte de la campaña electoral. En este sentido, se enfatizó en la importancia de que la administración Biden sea la única que no haya construido un solo metro de muro.
FUENTE: La Jornada