Cancún, QR. El costo del Tren Maya, según los contratos ya asignados en cuatro tramos y las previsiones presupuestales contenidas en las manifestaciones de impacto ambiental de los otros tres tramos asignados al Ejército, asciende a una cantidad de 299,367 millones de pesos, es decir, 150% más del monto original proyectado, que era de 120,000 millones.
De la inversión total, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ejercerá 183,870 millones de pesos, correspondiente a los tramos 5, 6 y 7 del gran proyecto federal.
Los costos previstos en las manifestaciones de impacto ambiental (MIA) de los tramos 6 y 7, recientemente ingresadas a trámite ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), revelan que estos trazos son los más caros de todo el recorrido de la obra insignia de la Federación.
El Tramo 6 tendrá una inversión de 70,174 millones de pesos, el más costoso del proyecto federal, mientras que para el Tramo 7 la cifra llega a los 54,093 millones, el segundo mayor monto, es decir, 124,267 millones de pesos entre ambos trazos.
A ello se suma el Tramo 5 sur, el cual originalmente se había adjudicado por licitación a Grupo México por 17,815 millones de pesos, pero recientemente se dio por terminado ese acuerdo para ser reasignado a la Sedena, cuyo monto actual será de 31,502 millones.
Por otra parte, para el Tramo 5 norte, también a cargo del Ejército, la inversión prevista es de 28,102 millones de pesos, de acuerdo con la MIA de cada uno de los trazos.
Lo anterior significa que a los 59,603 millones que costará todo el Tramo 5, se suman otros 124,267 millones de pesos para los tramos 6 y 7 que van desde Playa del Carmen hasta Chetumal.
Los demás tramos
El resto de los tramos del Tren Maya ostenta costos de obra menos elevados, por ejemplo, el Tramo 1, de Palenque a Escárcega, se asignó mediante licitación por un monto de 15,538 millones de pesos, mientras el Tramo 2, de Escárcega a Calkiní, por 18,554 millones.
Por su parte, el Tramo 3 Calkiní-Izamal presenta un costo de 10,193 millones de pesos y el Tramo 4 Izamal-Cancún de 29,985 millones, los cuales en su conjunto suman 74,247 millones.
A estos montos se agregan 36,560 millones de pesos por la licitación de los 42 trenes que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) firmó en junio del 2021 con el consorcio Bombardier Transportation y Alstom, en conjunto con las empresas GAMI Ingeniería y Construcciones Urales, según información del gobierno federal.
Cabe mencionar que también se dio a conocer en marzo del presente año que modificar el trazo del Tren Maya para que no cruce por la capital de Campeche costará alrededor de 4,667 millones de pesos.
Esto mediante un contrato adjudicado a la constructora Mota Engil para la construcción de un libramiento con 18.3 kilómetros entre las localidades de Chiná y Campo de Tiro, correspondiente al Tramo 2 del Tren Maya.
En resumen, los 183,870 millones de pesos que ejercerá la Sedena por tres tramos, más 74,270 millones por los restantes cuatro tramos adjudicados a consorcios privados, aunado a los 36,560 millones para la construcción de los trenes y a los 4,667 millones por el cambio de trazo en Campeche suman un total que asciende a 299,367 millones de pesos.
Los avances
Al cierre de junio de este 2022, el costo reportado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de todo el proyecto del Tren Maya, que cuenta con 1,500 kilómetros de recorrido, llegaba a los 167,341 millones de pesos, con un avance de obra de poco más de 40%, de acuerdo con los reportes semanales que emite el Fonatur.
Tan solamente los 183,870 millones de pesos que ejercerá el Ejército en tres tramos del Tren Maya superan ya en más de 16,500 millones dicha cifra, es decir, de todo lo invertido hasta el momento.
Aunado a ello, el gobierno federal aún no ha dado a conocer los sobrecostos que han implicado los cambios de trazo en el Tramo 5 que corre de Cancún a Tulum, el cual originalmente iría al centro de la carretera 307; después el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el tren correría sobre un viaducto elevado.
Aunque se iniciaron las obras e incluso se comenzó a excavar para iniciar con el hincado de los pilotes que sostendrían las vías del tren, en enero de este año esos trabajos se cancelaron para mover el trazo siete kilómetros al poniente de Playa del Carmen, donde no tardaron en tramitarse amparos por el riesgo que el proyecto supone para los ríos subterráneos y cenotes que abundan en la zona.
López Obrador reconoció que los amparos que mantuvieron detenida la obra entre marzo y junio de este año estaban “costando mucho” al erario, por lo que se declaró al Tren Maya, que recorrerá Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, como un proyecto de seguridad nacional para poder reanudar las obras pese a las suspensiones judiciales que pesaban en contra.
FUENTE: El Economista
